Las ciudades se vaciaron y la vida pasó a transcurrir en modo Zoom. Los trabajadores dejaron sus oficinas y abrieron su portátil para mantener jornadas de trabajo interminables. Así quedaron...
Las ciudades se vaciaron y la vida pasó a transcurrir en modo Zoom. Los trabajadores dejaron sus oficinas y abrieron su portátil para mantener jornadas de trabajo interminables. Así quedaron...